«Esta investigación surgió a raíz de la información brindada por un testigo con régimen de protección de que esta pandilla delinquía en esos sectores cometiendo diversos delitos; entre ellos, homicidio, privaciones de libertad, amenazas y lesiones», comentó la fiscal del caso.
Entre los criminales condenados están Rónald Alberto Bonilla, perfilado como cabecilla del grupo terrorista y a quien le impusieron 154 años de prisión; William Rafael Pineda, a quien le impusieron 74 años; Samuel Enrique Carvajal, quien fue sentenciado a 60 años; Miguel Orellana Hernández, quien purgará 45 años de cárcel, y Cristian Alexánder Hernández y José David Guzmán, quienes recibieron 43 y 30 años de prisión, respectivamente.
La Fiscalía General de la República indicó que al condenar a estos pandilleros «se resuelven diversos casos de homicidio agravado; entre estos, el de una mujer a quien le quitaron la vida en mayo de 2015 porque pensaban que colaboraba con la pandilla contraria».
La institución no brindó más detalles de las circunstancias bajo las cuales fue cometido el crimen.
En muchos casos de homicidio, las autoridades han determinado que los grupos terroristas atentaban contra la vida de las víctimas porque consideraban que filtraban información a las pandillas contrarias o porque sospechaban que colaboraban con la Policía para entregar a otros delincuentes.